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Música y turismo se fusionan en el Festival Mono Núñez

El próximo 8 de junio dará inicio la edición número 49 del Festival de Música Andina Colombiana “Mono Núñez”, en Ginebra, Valle del Cauca.

Este festival, reconocido por su riqueza cultural y musical, ha dejado un impacto significativo en el desarrollo turístico y la promoción de la región como un destino cultural imperdible; contará con una nutrida agenda de conciertos, tertulias y encuentros, que buscan preservar la magia de los ritmos andinos colombianos y enriquecer la experiencia cultural de los asistentes.

Uno de los aspectos más destacados del aporte del Festival Mono Núñez al turismo es su capacidad para promocionar los atractivos de la región. Conquista a una gran cantidad de visitantes, nacionales y extranjeros, que se ven seducidos por la belleza natural y los encantos turísticos de Ginebra y del Valle del Cauca.

La celebración de este evento resalta los tesoros ocultos de la región, generando un aumento en su visibilidad y promoviendo su imagen como destino turístico cultural.

Durante las cuatro noches de concurso, el público tendrá el privilegio de disfrutar a más de 120 artistas en escena, entre intérpretes vocales, instrumentales y de obras inéditas. Estos talentosos participantes provienen de diferentes zonas del país, incluyendo Boyacá, Caldas, Cundinamarca, Huila, Nariño, Santander, Valle del Cauca, Bogotá, Caquetá, Quindío y Risaralda.

Como parte de los invitados especiales, el Festival Mono Núñez se enorgullece en contar con la presencia de destacadas personalidades del folclore latinoamericano. Entre ellos se encuentran Facundo Cámpora y Jazmín Occhiuzzi de Argentina, Carlos Grijalba y el Grupo Indoamérica de Ecuador y la cuota colombiana estará a cargo del maestro Raúl Rosero y su propia Orquesta Sinfónica, La Orquesta Sinfónica de la Escuela de Música de Tunja que acompaña a la Gran Rondalla Colombiana.

Asimismo, el impacto económico del Festival Mono Núñez es innegable. Durante su realización, se observa un incremento sustancial en la demanda de servicios turísticos como alojamiento, transporte, alimentos y souvenirs.

Este flujo de visitantes y el auge cultural que supone generan un impacto positivo en la economía local, impulsando la actividad turística y fomentando además la generación de empleo en diversos sectores relacionados.

En resumen, el Festival Mono Núñez se consolida como referente nacional e internacional en el ámbito turístico, atrayendo a visitantes que disfrutan la música tradicional y optan por vivir una experiencia única en su género, alrededor del que es considerado el más importante certamen musical de nuestra música vernácula de las cordilleras, y no en vano también declarado Patrimonio Cultural de la Nación.

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