La necesidad de espacio para almacenamiento en Ecuador también atrajo la atención del Grupo Oikos, que invertirá en los próximos años US$ 2,5 millones en la apertura de la primera sede de Oikos Storage en ese país, específicamente en Quito, donde más hogares, negocios y empresas necesitan soluciones prácticas, económicamente asequibles y de alta calidad para guardar muebles, enseres, papelería y mobiliario, entre otros.
Según Luis Aurelio Díaz, presidente del Grupo Oikos, “elegimos Ecuador por tres razones: la primera, por su cercanía geográfica y su parecido sociocultural con Colombia; la segunda, por el conocimiento que tenemos del mercado ecuatoriano, y, finalmente, por ser un país dolarizado, lo que disminuye la incertidumbre inflacionaria, generando así una mayor tranquilidad en el mercado”.
La llegada de la compañía a Quito es el primer paso para otra apertura proyectada en Guayaquil, que confirma el potencial para el negocio del self storage (almacenamiento) en la región. “Esperamos consolidarnos de manera muy rápida para seguir mirando otros países como Perú y Venezuela”, reveló Díaz, quien destacó la participación de la empresa Uribe Schwarzkopf en la construcción de la sede.
Alianzas para el desarrollo
Según el presidente del Grupo Oikos, “en Uribe Schwarzkopf encontramos un gran aliado para nuestra llegada a Ecuador. Es una empresa que, como Oikos, está dedicada a la construcción; además, es líder en ese país, con una trayectoria de muchos años y con un potencial de crecimiento excepcional. Tras la alianza, Oikos será el operador del negocio de las minibodegas, en un activo construido por ellos”, enfatizó.
El directivo reiteró que una fortaleza de la incursión en el exterior es “contar con aliados estratégicos, líderes en el sector donde se desempeñan. Buscamos alianzas a largo plazo para definir, de manera conjunta, la hoja de ruta que nos permitirá consolidar las operaciones y crecer de manera sistémica en el mercado al que llegamos”.
Sobre la coyuntura socioeconómica de la región, Díaz reconoció que “la clave está en la cautela, pero sin dejar de actuar con decisión. Por eso, luego de analizar de manera detallada los mercados y entender la dinámica de cada uno de los países, no hay que dudar en dar el paso en optar por la inversión, que al final es el combustible que permite que una economía no se detenga”, concluyó.
