Más de 2.7 millones de dispositivos de consumo en el país deberán ser reemplazados ante el próximo detenimiento del soporte de versiones antiguas de Windows, lo que limita su funcionalidad, seguridad y compatibilidad con nuevas tecnologías, de acuerdo con un análisis de Intel y Microsoft.
Dado que es un tema de obsolescencia tecnológica, será un fenómeno que se vivirá en todo el mundo. Más de 36 millones de dispositivos de consumo en América Latina están listos para ser renovados, lo que representa una oportunidad crítica para modernizar el panorama tecnológico y mejorar la productividad. Según Intel, el 84 % de estos equipos no puede ser actualizado a Windows 11, lo que obliga a su reemplazo para cumplir con los estándares actuales de ciberseguridad, eficiencia energética y compatibilidad con IA.
Particularmente, Colombia se posiciona como el cuarto mercado con mayor volumen de computadores listos para renovación en América Latina.
“La adopción de computadoras con inteligencia artificial marca un punto de inflexión en la experiencia de los usuarios. Esta renovación responde tanto a una necesidad tecnológica como a una expectativa creciente por contar con equipos más eficientes, seguros y listos para integrar soluciones con IA en la vida diaria”, señaló Juliana Hurtado, directora de Ventas de Consumo para Intel en América Latina.
Renovación que aprovechará la IA
La edad promedio de los dispositivos en la región supera los siete años de antigüedad. La mayoría de ellos corresponde a marcas como HP, Lenovo y Dell, aunque existe una base significativa de fabricantes diversos.
Intel mantiene una participación de mercado superior al 64% en todos los países analizados y llega a 93.4% en Brasil, posicionándose como uno de los principales habilitadores de este proceso de transformación.
La renovación, según Intel, se sustenta en cuatro pilares clave:
- La consolidación de computadores con inteligencia artificial (AI PC, por sus siglas en inglés), impulsado por nuevas demandas de usuarios y empresas.
- La adopción de procesadores con NPU integrada, como los nuevos Intel Core Ultra.
- El detenimiento del soporte de Windows 10, que compromete la seguridad de los equipos.
- El agotamiento del ciclo de vida del hardware actual, que limita la productividad y la eficiencia.
En paralelo, el 70 % de los equipos en circulación supera los cinco años, lo que incrementa los costos operativos y reduce la capacidad de respuesta de empresas y entidades públicas.
Por volumen de dispositivos listos para renovación, los otros mercados más relevantes en América Latina son: Brasil (15.2 millones), México (7.6 millones), Perú (3.6 millones), Argentina (2 millones) y Chile (1.8 millones). Esta distribución refleja el tamaño de la oportunidad para modernizar la infraestructura tecnológica en la región.
Hacia una infraestructura lista para IA
Como parte de su estrategia, Intel presentó la segunda generación de procesadores Intel Core Ultra, diseñados para entornos de trabajo híbrido y con capacidades integradas de IA. Estos procesadores no solo ofrecen mayor rendimiento y eficiencia energética, sino también compatibilidad con herramientas como Microsoft Copilot+ y una autonomía de hasta 20 horas de batería, lo que los convierte en piezas clave para los nuevos AI PCs.
Además, en el ámbito corporativo e industrial, Intel presentó los procesadores Xeon 6, que ofrecen hasta 1.5 veces más rendimiento en inferencia de IA frente a su competencia, con menor consumo de recursos, y que apuntan a consolidarse como la CPU de referencia en entornos de IA y centros de datos.
“Hoy, los usuarios ya no solo evalúan la potencia de sus dispositivos, sino su capacidad de ofrecer experiencias más inteligentes. Modernizar su PC es una forma de prepararse para lo que viene y asegurar un desempeño óptimo en el día a día”, concluyó Hurtado.
Esta coyuntura representa más que un desafío técnico: es una oportunidad económica concreta para impulsar la productividad, la innovación y la digitalización en sectores clave. Para Colombia, donde el ecosistema empresarial busca adaptarse a nuevas tecnologías y procesos basados en IA, la renovación del parque tecnológico podría ser un catalizador de competitividad y crecimiento.