En la actualidad, las organizaciones se enfrentan al desafío de gestionar una variedad de soluciones de seguridad para proteger un amplio espectro de servicios que abarcan múltiples vectores, como correo electrónico, dispositivos móviles, estaciones de trabajo, servidores, nube híbrida, redes, Internet de las cosas (IoT) y entornos industriales y operacionales (OT). Analizar y evaluar el riesgo en este mundo hiperconectado puede resultar tedioso y extremadamente complicado, afectando seriamente la postura de seguridad de las empresas.
Por ello, en un entorno digital donde las amenazas cibernéticas evolucionan constantemente, es crucial que las organizaciones asuman proactivamente la responsabilidad de entrenar a sus equipos sobre los riesgos más recientes y relevantes en ciberseguridad.
Trabajar con herramientas de seguridad diversas presenta desafíos, como procesos de investigación manual tediosos y puntos ciegos peligrosos que permiten a los adversarios esconderse y maniobrar fácilmente en el entorno corporativo. Esta falta de visibilidad sobre el entorno y las tácticas de los atacantes puede dar lugar a respuestas inadecuadas e incompletas.
Para mejorar proactivamente la postura de seguridad, detectar y responder rápidamente, y optimizar las operaciones de seguridad y TI, los equipos de seguridad y Centros de Operaciones de Seguridad (SOC) necesitan herramientas avanzadas. Si bien la ciberseguridad ya no es opcional, cambiar la aproximación es esencial, abordando proactivamente áreas adicionales de riesgo, como activos desconocidos, controles de seguridad débiles o mal configurados, activos vulnerables y configuraciones erróneas de la nube. Igualmente, hay que tener claro que la ciberseguridad es una responsabilidad compartida, tanto los vendors, como de los clientes.
Se requiere un enfoque basado en una plataforma unificada centrada en el análisis de riesgos, que proporcione una visión holística de todos los servicios productivos y asegure una protección centralizada contra todas las superficies de ataque. Este enfoque no solo mejora la eficiencia operativa a través de la automatización y orquestación, sino que también fortalece la resiliencia de seguridad.
Trend Vision One es una plataforma unificada de ciberseguridad que demuestra ser un ejemplo del enfoque mencionado, que incorpora no solo capacidades de detección y respuesta extendida (XDR), sino que también ofrece soluciones para la visibilidad y gestión de la superficie de ataque incluyendo capacidades de (ASRM) y utiliza inteligencia artificial generativa a través de su AI (Companion) para mejorar la eficiencia operativa. Al adoptar este modelo, las organizaciones eliminan silos, reducen los tiempos de detección de amenazas y mejoran la eficiencia en la detección y respuesta ante incidentes.
Para finalizar, mediante un enfoque basado en una plataforma unificada de seguridad y análisis constante del riesgo, las organizaciones pueden mejorar su ciber resiliencia ante amenazas cibernéticas.
En el mundo de la ciberseguridad, el tiempo es la unidad de medida entre el éxito y el fracaso en la respuesta a incidentes de seguridad.
