Con la finalidad de medir el impacto ambiental de carbono de su ecosistema de TI, contribuyendo a los objetivos de sostenibilidad de la organización, Dynatrace anunció que está colaborando con Lloyds Banking Group, uno de los principales proveedores de servicios financieros del Reino Unido.
Para abordar esta necesidad, Dynatrace utiliza información y comentarios de Lloyds Banking Group para seguir desarrollando Dynatrace Carbon Impact.
La aplicación traduce métricas de utilización como de CPU, memoria, disco y E/S (network I/O) de red, a su equivalente en dióxido de carbono (CO2e). También proporciona orientación práctica sobre cómo reducir la huella de carbono total de TI. Además, detalla el consumo de energía y CO2e por fuente con filtros para ayudar a enfocarse en áreas de alto impacto.
Por ejemplo, destaca instancias subutilizadas en un centro de datos específico junto con los principales emisores de CO2e dentro de un grupo de host distinto.
Para lograr estos objetivos, Carbon Impact aprovecha la plataforma Dynatrace y su topología Smartscape y mapeo de dependencias, proporcionando información precisa de optimización y contexto automático de aplicaciones y procesos para establecer las bases de las iniciativas de codificación verde.
Klaus Enzenhofer, líder de Producto en Dynatrace, dijo: “Dynatrace implementó con éxito la aplicación Carbon Impact el año pasado, y hemos estado trabajando con Lloyds Banking Group para desarrollarla aún más con el fin de dar soporte a los entornos híbridos y multinube de nuestros clientes. Esto nos ha permitido acelerar y enfocarnos en el desarrollo de productos mientras ayudamos a nuestros clientes a cumplir sus objetivos de sostenibilidad”.
Kevin Bird, director de Rendimiento Operativo y Análisis en Lloyds Banking Group, dijo: “Trabajar con Dynatrace nos ha ayudado a evaluar la visibilidad e impacto de nuestras emisiones de carbono en TI. Nuestros esfuerzos de sostenibilidad requieren granularidad profunda, y colaborar juntos nos ha permitido ver dónde nuestros esfuerzos tienen más impacto en el contexto de nuestra arquitectura de TI más amplia. Esto nos ayuda a identificar oportunidades más significativas para optimizar nuestra infraestructura digital y será un paso crítico hacia adelante a medida que trabajamos para reducir al menos un 75% de las emisiones directas de carbono de nuestro sector operativo”.
